sábado, 22 de mayo de 2010

jueves, 13 de mayo de 2010

¿Por que cuesta tanto quererse?






Duele ver como no ponen freno a la masiva publicidad engañosa de un mundo perfecto, de un mundo de televisión, de un mundo modelico.
Nos venden la delgadez con todo.
Se olvidan de que detrás de esa publicidad hay niñas/os, mujeres y hombres inseguras/os y maleables que no hace falta decirles mucho para convencerles.

Creo que si son conscientes de lo que hacen, pero no de la magnitud del daño que crean.
Es duro, pero creo que deberían sufrirlo de cerca...algún familiar, alguna hija....

Si soy una victima mas de los complejos o al menos lo fui una vez. Tanto que enfermé y me jugué la vida a la ruleta rusa. Pero el tiempo, los médicos, la familia y el cariño me empujaron hacia la recuperación.
Hoy vuelvo a coger las riendas de mi vida, he perdido tantos años, que me siento como una niña dentro del cuerpo envejecido de una mujer adulta.
Me he perdido cosas que no recuperaré jamás y que no podré vivir en la vida.
Pero si lo miro desde el punto en el que estoy, lo prefiero...Por que aun respiro.
Tengo que aprender a vivir partiendo desde donde estoy hoy.

Jamás pensé que yo podría caer, pero lo hice...ni siquiera sabía lo que era. Pero todo empieza siepre igual. Te quitas esto, te quitas lo otro hasta restringir TODO.

Si todo, no comía nada en absoluto, solo bebía agua, muuuuucho té y fumaba 2 paquetes de tabaco diarios.
Me aislé poco a poco, de repente desaparecí para el mundo, solo quería evitar a los que podían instigarme a comer. Esos eran enemigos.

Cuando llegaba la hora de la comida, siempre había excusa...había comido fuera, me habían invitado...lo que fuera.
Daba paseos a la cocina para disimular, pero solo cogía agua. Agua, agua y más agua. Llegué a tener problemas por la gran ingesta de agua. Bebía unos 7/9 litros diarios.

Cuando empecé con los mareos, la cosa se complicó, era dificil de esconder. Y pronto la gente empezó a sospechar. Yo ya había bajado muuucho peso.
(* Por cierto ahí es cuando más ligaba, por eso sentía que merecía la pena. Yo solo quería eso que nunca tube, ser bonita para los demás. ¡¡¡¡¡IDIOTA!!!!!)

Había que aparentar lo que ellos querían, en el instituto me pusieron una "tutora", era una "amiga" que se encargaba de cuidarme, me seguía y luego daba parte de mis movimientos (jajaja, era muy fuerte).
Pero todo lo que ella veía se lo callaba, por eso digo "amiga"....perdón, ella no era responsable...solo quería protegerme....jo!!!
Así que pude seguir con mi mundo extraño.
Por aquel entoces yo acababa de empezar con un chico (tooodo corazón), y por mi culpa lo estropeaba cada dos por tres...era un desastre, le trataba como una mierda...solo quería evitar que me descubriera...pero como me comportaba como una loca, el pensaba que le engañaba.
Yo quería pasar tiempo sola y su presencia me molestaba y se lo hacía ver. Le trataba muy mal..le evitaba y le ponía escusas para no pasar tiempo con el y así yo no comía y el no sufriría (ja, eso no me lo planteé nunca...solo quería evitar el comer, pues siempre que estabamos juntos insistía en cenar o tomar algo por ahí).

Con el tiempo mi cuerpo empezó a sentirse bastante mal...Mi regla desaparecía. Mi pelo se caía. Me salía un vello blancuzco por la cara y los hombros. Gracias al agua tenía diarreas crónicas y los riñones jodidos. Tenía frío siempre, hasta en verano.
Mi piel apenas tenía color, no se regeneraba bien y parecía envejecida.
El sistema inmunitarío calló en picado. La memoria se convirtió en una laguna, que me aislaba.
Estaba cansada siempre, el hierro estaba muy, muy bajo. Sufría dolorosos calambres a todas horas.
Mi pelo perdió brillo y se caía a puñados.
Mi cabeza era una madeja de pensamientos tristes, sin esperanzas y sicóticos.

Pese a todo esto...yo seguía negando que algo me pasaba, algo que terminaría conmigo.

Pero como lo bueno siempre permanece y la gente que merece la pena siempre estará a tu lado...aquel muchacho que aguantó mis estupideces, se quedó y bueno ya os podeis imaginar...No fue salir a la primera, pero poco a poco y hasta los 27 años hemos luchado y hoy con 30 (casi) puedo decir que soy yo.

Pertenezco al club de las ex.
(Nunca puedo bajar la guardia, esa siempre se encuentra al acecho...pero ya no es lo mismo. Ahora ya no estoy sola y soy algo más madura y me quiero)

Defiendo las curvas, pero odio eso de "tallas grandes".

lunes, 10 de mayo de 2010

Inú un espíritu de vida.



Inú nació de las aguas y de la tierra, entre flores y hojas de nenúfar.
Pero no solo ella era recibida con alegría, la primavera traía mas de 2000 pequeñas hadas, hermanas todas ellas.

Desde un primer momento Inú empezó a destacar, tenía ganas de trabajar, de aprender, quería tenerlo todo ya. Lo que hacía que desentonara y entorpeciera con su ímpetu el aprendizaje de las demás, ya que ella siempre quería ser la primera en todo.
Era sabido que poseía aptitudes y gran inteligencia, pero carecía de paciencia.
No era arrogante y tenía gran corazón, pero todo debía hacerse a su manera, sin darse cuenta de que las demás no podían seguirla el ritmo y que mientras ella ocupaba dos tareas, las demás solo se dedicaban a una.
A ella eso le parecía lento y aburrido, sin darse cuenta de que sus maneras realmente no eran tan fiables, pues al querer hacerlo todo rápido y a la vez , había cosas que se quedaban a medias o sencillamente no estaban bien rematadas.

Crecía la pequeña hada y esto seguía sucediendo, pero las responsabilidades eran cada vez más grandes y la dificultad era mayor, pero aún así ella no veía inviable su manera de trabajar.
En la escuela les enseñaban a usar la magia que había dentro de sus espíritus y para ello se requería concentración, paciencia y serenidad.
Eran cualidades de las que Inú carecía por el momento, pero no por que no las tubiera, si no por que no era capaz de comprender que las cosas así se no conseguían.
Si se concentrara en las clases se acordaría de las explicaciones de la hada maestra; si fuese paciente podría repetir los trucos una y otra vez hasta que aquello saliese perfecto y si respirase profundamente y contase hasta tres (o hasta diez en algunas ocasiones)conseguiría serenidad para ver las cosas claras y lograr descubrir las respuestas.
La relación con sus hermanas no era del buena, pues con esta aptitud Inú solo conseguía descontentos por parte de las que la rodaban.
Inú pasaba casi todo el tiempo sola. A ella esa situación le apenaba, pero se refugiaba en sus que haceres y libros. No hacía por arreglar la situación. Cuando conseguía ser aceptada por el grupo, siempre terminaba la cosa mal.
Los mayores desde fuera, andaban todos preocupados por que esto no le iba a reportar nada bueno en un futuro.
Inú empezó a fallar cada más en sus deberes, ya apenas le importaba esforzarse para sacar el mínimo.
Aveces la tristeza se hacía negro en su espíritu y cuando tenía que hacer algún encantamiento, la cosa no salía bien y se armaba buena en la escuela.
Las hadas maestras ponían todo su empeño, paciencia y amor en aquella hada. Pero aquello generó un segundo problema, las demás querían el mismo trato y celosas no trataban con agrado a la hadita, dándola de lado.

La hada crecía y con ella sus aptitudes negativas.
Al no ser aceptada por sus hermanas, se cobijó en las hermanas oscuras, apartándose así de la luz y apagando la magia de su espíritu.

Su cuerpo se empezó a transformar. Aquellos ojos llenos de vida se tornaron negros, sus delicadas manos ahora se deformaron en garras, su piel y sus mejillas sonrosadas , perdieron todo su color.
Ya no era la misma, parecía como si hubiese perdido la voz. La alegría había desaparecido de su alma y a su paso allí por donde pisaba dejaba una huella de muerte.
Muriendo a su paso los brotes recientes, marchitándose todo lo nuevo que la primavera traía. Las flores, que luego darían paso a los frutos se desintegraban como polvo en el aire.

La pena que devoró su alegría, la estaba posellendo y no la permitía ver lo que estaba ocurriendo a su alrededor. Ver que con su aptitud iba a desaparecer la continuidad de las estaciones.
Era responsabilidad de las hadas el mantener el equilibrio en toda la naturaleza y estaba peligrando seriamente.

Ya nadie sabía como hacer reaccionar a la joven. Hasta que arta, la mas anciana de las hadas. Decidió atajar el problema. Obligó a la muchacha a restablecer y reequilibrar el orden de las cosas.
Pero ella había perdido el hilo de las clases y no sabía como ni que hacer.
Lo intentaba una y otra vez, pero lo intentaba a su manera y sin creer en si misma.
Aún la tristeza y la oscuridad la hacían presa.
La anciana con sus buenas palabras, transmitió serenidad a la joven hada y sintiendose apoyada y comprendida, alcanzó la concentración necesaria para recordar las enseñanzas de las maestras.
Aún así la joven no era capaz de hacer que aquello saliera, ella lo intentaba una y otra vez, pero nada.
Una y otra y otra y ooootra vez más.....Nada, nada, nada, ¡¡¡¡NADA!!!!
La joven se desesperaba,lloraba y lloraba desconsolada.
Frotaba sus enormes y negros ojos, y cuanto más lloraba más dolía. La anciana al ver a aquella pobre hada convertida en un estraño ser y deshecha por la pena y el remordimiento, no pudo hacer otra cosa que agachar su maltrecho cuerpo y arrodillarse junto a la niña. La agarró la cara, la apartó los cabellos y cogió con su otra mano agua de un charco que el rocío había creado y la enjuagó las lágrimas. El mismo frescor del agua, la hizo respirar ondo, calmándola un poco aquella angustia. La pena que dentro de ella se escondía empezaba a salir y a disiparse.
Vio su reflejo en el agua era un rostro nada familiar, pero que sabía que le pertenecía. Estrañada y al mismo tiempo asustada miró a la anciana, esperando una respuesta por parte de ella. Pero esta solo le mostraba una sonrisa y un dedo que señalaba hacia el suelo, justo donde la joven trabajó su magia. Era un brote nuevo y fuerte.
"La paciencia da sus frutos" le dijo la anciana, seguidamente esta se levantó y lo mismo hizo la joven hada. La anciana, colocó una mano sobre el hombro de la más joven y le impuso la responsabilidad de cuidar de las cosechas, hasta su recolección.
Era un trabajo arduo, que requería paciencia y mucho amor.
La mujer creía en ella y eso la motivó, creyendo en si misma, siendo capaz de cometer su tarea.

Ahora pasa el tiempo en silencio, entre las cosechas. No se la ve pero se la siente por que los brotes crecen, las raices se hacen fuertes, las flores brotan y los frutos emergen despues de un tiempo. No se la ve, pero está ahí.....Paciencia.

FIN.

Idea original: Mayte. Mayo 2010.

A mi hijo...tambien pertenece al mundo mágico. Te quiero.



Ulisses 33.


Los diminutos.


Tao tao.


Los Snorkels.


Pumuki.


El osito Misha.


Noeli.




Marco.


Lupin.


La aldea del arce.


La pequeña Memole.


La flor de los siete colores.


Dos fuera de serie (Juana y Sergio)


La panda de Julia.




Heidi.


Los osos gummy.


Los Fraguel rock.


El duende mágico.


Abeja Maya




Comando G.


Chicho terremoto.




osos amorosos.


Candy Candy.


Barapapás.

La infancia de los de los niños de los 80.

Como buena nacida en los 80,quiero rendir honor a esos dibujos y programas que nos acompañaron en nuestra niñez.
Quería recoger los más emblemáticos y de los que guardo un grato recuerdo.
Esos que veíamos nada más salir del cole. Sentados delante de aquella televisión telefunken, con un bocata de chocolate o de jamón york con mantequilla y que duraba una eternidad.
"Merendábamos" en compañía de Espinete, Don Pipón, el rarito de Chema el panadero, Julián el kioskero (con aquellas horrorosas máscaras colgadas del chiringuito-carretilla), Anita...la aborrecible ana.
Mientras nuestras mentes se quedaban en puntos suspensivos, sin dar señales de vida inteligente...de vez en cuando y por inercia contestábamos con un "si mamá, yaaaaaa..." a una voz que interrumpía con frecuencia, ordenándonos que apagásemos la tele y que nos pusieramos a hacer los deberes...pero después de aquello la vida frente al televisor seguía, haciendo caso omiso a las peticiones de aquel ente extraño que parecía querer poseernos con insistencia. Una y otra vez se pronunciaba, hasta que el silencio se hacía, era entonces cuando un "algo" nos sacaba de aquel trance hipnótico y percibiamos la presencia del ente. Ahora con cuerpo, tenía forma humana con los brazos en jarras y con un tono más enérgico, erea mi madre, que enfadada se encargaba personalmente de apagar la televisión...yo aún con el bocadillo casi sin empezar (después de una hora y el pan reseco de cojones...)solo podía alegar: "¡¡¡¡Pero si no me he acabado el bocadillo!!!!"....

Pobre mamá...(ahora soy yo el ente, jejejeje).

Esto no solo ocurría por las tardes, esto se repetía al acostarse que no me iba a la cama si no salía "casimiro" con su canción y por las mañanas con "la bola de cristal". Todo un ritual.

Para vosotros niños de los 80...



El barrio sésamo.


Sherlok Holmmes.


Arco iris.


Don quijote y Sancho.


Dragones y mazmorras.

(continua en la siguiente entrada)

domingo, 9 de mayo de 2010

Videos...

"Requiem por un sueño" de Mozart.



"LA danza de las hadas" de tchaikovsky.:



"El pajaro de fuego" de Stravinsky: (versionado por Disney en fantasia 2000, me encanta)